Este fin de semana he estado en el Summercase en Boadilla del Monte, pasando calor, tragando polvo, engullido por la masa, pero sobre todo, disfrutando de la música como pocas veces... Es cierto que podía haber estado mejor, seguro, pero aún así, ha sido alucinante. Dos días de música perfectos:
Viernes 13 de Julio
Llego prontito y me dedico a deambular por los puestos y cotillear mientras espero que empiece el primer concierto. Me choca la tremenda ironía del puesto de información sobre drogas cuando está claro que muchos de los asistentes tiene más conocimiento del necesario. El puesto de Myspace tiene pinta de ser divertido, con los mismos artistas del festival y algún invitado pinchando en un improvisado set (con hamaca incluida) aunque la ubicación, demasiado cercana al escenario grande, deja mucho que desear. Me tomo un Eristoff (si hijo si) Black para probarlo. Es como si te tomarás el normal con unas gotitas de tinta de calamar, que, curiosamente, mejorasen la calidad del vodka. Así de malo es el original. Me regalan una bandolera y unas chapas, me cubren de publicidad y me hacen rellenar dos encuestas. Harto de deambular, me voy al escenario a coger sitio.
The Sunday Drivers es una de mis debilidades del panorama nacional y uno de los pocos grupos españoles que cantando en inglés no se ha subido al carro de cambiar de idioma. No digo que eso este bien ni mal, solo informo. Un concierto más que correcto, buena comunión con el publico, que en un número menor del que esperaba, corean al grupo sin parar. Es el primer concierto, buen sabor de boca, y la cámara ya sin espacio... leches.
Me acerco al otro escenario grande a ver si cazo algo del concierto de Badly Drawn Boy. No me gusta demasiado su actitud y además este tío pierde mucho en directo. Escucho dos canciones, me canso, y me voy. Tengo que tomar la difícil decisión de avituallarme o ver a Miqui Puig... Que rico sabe el bocata (y eso q no era muy bueno) cuando sabes que te está impidiendo cometer un error. Claro que en la otra carpa estaba Perry Blake. Anda, Karel, que podías haber estado más listo. Empiezan My Brightest Diamond y Soulsavers prácticamente a la vez. Sentía curiosidad por ambos así que les doy una oportunidad: pese a su magnífica voz, los agudos de la cantante de los primeros me dan dolor de cabeza y pese a los esfuerzos de Mark Lanegan, Soulsavers suena lamentable en directo.
Dejo de hacer el idiota y me voy a ver a James. Y como voy a arrepentirme de no haber estado allí desde el principio, pedazo de concierto oiga. Se dejan la piel en el escenario, sobre todo el cantante que como dijo alguien: "parecía que iba a explotar e iban a salir miles de brazos y piernas".
Estar lejos del escenario en el concierto de James me permite llegar bien al de Jarvis Cocker y pillar sitio relativamente cerca. Hay mucha expectación en la carpa y Jarvis convence y de que manera. El artista de la pose con marca registrada da un magnífico espectaculo y convence a los incrédulos. Yo no era uno de ellos. El disco me encanta y el directo no me defraudó.
Decido hacer reavituallamiento, y tardo más de lo esperado. The Jesus & Mary Chain han empezado y la cantidad de gente que hay hace que me decida por ver a The Gossip. Sí, lo se, no hay color. Pero nunca he sido un gran fan de The Jesus & Mary Chain y pensé que el concierto de los the Beth Ditto iba a ser más divertido y sobre todo, menos masificado. Beth es conocida por montar el lío en cada concierto, y de contagiar al público con su energía. Lo segundo, desde luego, lo consiguió. Lo primero no tanto. Estuvo bastante comedida incluso cuando al guitarra/bajista se le fue el sonido. Pese a todo, me dejé la piel bailando y saltando... ¿Y como no iba a hacerlo viendo a la Ditto mover más kilos que los míos? Es realmente contagioso y la música, siempre divertida, ayuda bastante. Eso sí, sigo diciendo que esta mujer tiene una voz que podría dar mucho más de sí y que está desaprovechada.
Saliendo de este concierto me encuentro con Blanca, Guille & CO y m voy con ellos a ver a OMD. La verdad, me paso el concierto de chachara con Blanqui, pero puedo destacar que técnicamente estuvieron muy bien. Fueron los que mejor sonaron en la carpa de lejos. Eché de menos Enola Gay, no se si me la perdí por llegar tarde o porque no la tocaron, pero como dijo un amigo después, hay canciones que deberían sonar por contrato en los conciertos de algunos artistas.
Tras ellos, entraron !!! y empezarón muy fuerte. El cantante es un show la verdad, tendríais que verle bailar. Pero había un monton de gente que no paraban de pasar por nuestro lado, estabamos incomodos y nos salimos. Escucho el final del concierto entre frases y hasta sentado en un lado de la carpa. Divertidos, pero no espectaculares. Después me pasé a ver a The Chemical Brothers. Como siempre, son un espectáculo impresionante, pero mis párpados se empeñaban en cerrarse así que tras escuchar Get yourself high y Hey Boy Hey Girl me quedé satisfecho y di el primer día por finalizado.
De la vuelta a casa mejor ni hablo
Sábado 14 de Julio
Decido empezar con un concierto que esperaba no tuviera mucha gente, ya que eran los casi desconocidos 1990s. Había leido sobre ellos e incluso tengo el disco bajado y he escuchado un par de canciones, pero sinceramente no les he prestado suficiente atención, así que ante la buena crítica, decido darles una oportunidad. Consigo sitio en primera fila (no era muy difícil) y disfruto de un muy buen concierto. A diferencia de otros, se les nota que se lo pasan genial en el escenario (con su birra y todo dando envidia) y dieron un concierto bastante bueno. Powerpop británico fresco y divertido. Mirad:
Me quedo en la misma carpa para ver al Sr. Chinarro. Mientras esperamos, juego con las Tegan & Sara canarias (un saludillo chicas) a ver quien adivina más canciones del hilo musical mientras asistimos a un momento gracioso.
Reconozco que Sr. Chinarro no pegaba mucho en el festival, pero el disco me ha gustado y ya que estoy ahí en primera fila, pues aprovecho. Muchísimos problemas de sonido y una actitud algo desganada y triste (me pareció entender que no estaba pasando buena racha) deslucieron el concierto. Me fui pronto, pero antes grabé una de mis canciones favoritas:
Por cierto que el bajista es de Maga o al menos yo le vi en el Sonorama.
Me vi el final de los Guillemots fundamentalmente porque quería pillar sitio para PJ Harvey (y ya me estaba acostumbrando a la primera fila). Estuvieron bastante bien, muy profesionales y con un sonido muy bueno (sobre todo el batería, espectacular). Tendré que darle otra oportunidad al disco.
Y en eso que llego la Reina, ataviada con vestidito blanco garabateado y peinado retro, muy alejada de la imagen de femme fatal a la que nos tiene acostumbrados. Desde mi privilegiado sitio (primera fila) y con la ignorancia de la primera vez, la vi con una actitud con la que no me la imaginaba, todo dulzura y sonrisas. Bueno, siempre que no tiene una guitarra en las manos, que entonces se transforma. Actuación totalmente en solitario, empañada por el hecho de oir de fondo el concierto de Phoenix cada vez que PJ Harvey nos deleitaba con una canción lenta (toco varias nuevas con el piano), pero que no defraudó en absoluto. Con un público entregado (quizá demasiado) que coreaba cada una de las canciones, las conociera o no, y la apoyaba y daba animos cuando se producían problemas de sonido. Disfruté muchísimo con el concierto y me quité una espina que llevaba desde hace años. Las grabaciones aquí empezaron a flojear por falta de pilas, el Rid of Me no quedó muy allá así que os dejo con Man size:
Aún con la sonrisa en la boca, me fui a ver el comienzo de The Flaming Lips, que me habían recomendado y mucho. La puesta en escena era espectacular, con un escenario lleno de cachibaches, duendes verdes, superheroes y papa noeles. Con Wayne Coyne dentro de su bola transparente andando, literalmente, por encima del público. Con explosiones de serpentinas, espectáculo de luces y globos azules por todas partes. Una maravilla vamos. Lástima que la interpretación dejara un poco que desear. No me estaba convenciendo nada y decidí escuchar el final desde lejos...
...en concreto desde las primeras filas del otro escenario grande, donde me senté una hora antes para pillar sitio para ver la razón fundamental de mi presencia en este festival. Ver a Arcade Fire. Cuando llegué, estaba en tercera/cuarta fila. De alguna manera se me fue colando gente en esa hora y acabé en sexta o séptima. Y tenía a unos imbeciles borrachos a mi derecha que no paraban de dar saltos (normal) y dejar pasear los codos (no tan normal). Me llevé dos pisotones y un más que probable esguince. Daba igual. Estaba allí, y cerquita. Empezaron con mucha energía y no bajaron el pistón en ningún momento. En algún momento Joaquín, un compañero de curro que andaba cerca, me preguntó qué tal... No se ni lo que respondí, yo estaba alucinando. Son taaan buenos. Tocan todos cualquier instrumento, además de forma genial; utilizan cosas inverosímiles (un megáfono, cascos de moto, un organo de iglesia...); emocionan con sus interpretaciones y se lo pasan genial. Mención especial para Régine Chassagne de la que desde ahora y de manera oficial, estoy secretamente enamorado. Ya, ya se que es la mujer de Win Butler, pero no pasa nada, es platónico. No dejó de sonreir en todo el concierto y no sólo cantaba, interpretaba las canciones. Una autentica delicia llena de energía y talento.
¿Se nota que me gustó el concierto? Pues eso no es todo, pudo ser mejor. Llegando al final Richard Reed Parry lanzó la baqueta con la que tocaba el tambor al público... directamente a mi cabeza. Alguien la tocó lo justo para que me cayerá a los pies, instintivamente reaccioné pisándola y durante 5 segundos fue mía. Pero uno de los idiotas borrachos, que o no lo estaba tanto o llevaba algun ensalzador de los reflejos, me la quitó de debajo del pie antes de que pudiera agacharme. Lástima, hubiese sido un grandísimo recuerdo de lo que de todas formas fue un concierto inolvidable. Para muestra, un botón:
El resto del festival pasó sin pena ni gloria. Escuche el principio de Bloc Party y un poco de LCD Soundsystem pero estaba destrozado y no me apetecía meterme en mogollones, así que me senté un rato a escuchar pinchar a Belle & Sebastian. Más que interesante aunque más cañero de lo que esperaba. Luego me pasé a ver a Scissor Sisters. Divertido y poco más. Excesivamente histriónicos para mí y se nota muchísimo el bajón de calidad de este segundo disco.
En fin, un festival muy completito que he disfrutado mucho pese a la masificación (demasiada gente, se han pasado), a los precios y a las incomodidades. Porque lo más importante y lo mejor de todo fue lo que tenía que ser: la música.
Al Cesar lo que es del Cesar: parece ser que OMD inició el concierto con Enola Gay y a las prubas me remito
http://www.youtube.com/watch?v=ha8tFWE9ukY
Publicado por: kadeworld | 16/07/07 en 2:20
Huoola Karel,
Veo que te diste mucha más paliza que yo, que acabé reventado ambos días con sólo 3 o 4 grupos vistos. Ya no estoy hecho para estos trotes. A mí que me pongan mi cervecita, una sala acogedora y una banda underground sin aglomeraciones, jeje.
¡Te añado!
Publicado por: El Señor Rata | 16/07/07 en 15:42
Qué grandes Arcade Fire. Yo lo ví en primera fila (me perdí a los Flaming Lips guardando el sitio) y fue sin ninguna duda el mejor concierto de mi vida. Me ha gustado tu cronica del Summercase, me pasaré por aquí de vez en cuando.
Publicado por: Tyhwer | 01/08/07 en 16:40